EL CORAZON DEL PADRE

Para muchos hombres, incluso para un buen número de cristianos, el Padre celestial sigue siendo un desconocido. El término “Dios” suscita la idea de un ser inmenso y temible, de alguien al que no pueden imaginar que se le dé el nombre de padre. Acatan al Soberano Señor que todo lo gobierna, pero están muy lejos de considerar esta soberanía esencialmente animada por un amor paternal.

Cristo nos ha traído la presencia del Padre, presencia que encontramos no sólo en las páginas del Evangelio, sino en el fondo mismo de nuestra alma. Es ahí donde realmente quiere habitar Cristo, y el Padre con él. Es Él quien ha recorrido la distancia que nos separaba y la ha recorrido en su totalidad. Y está mucho más implicado en nuestra existencia de lo que podemos suponer: cuando lo creemos lejano, severo o hasta cruel, su presencia está allí —en nuestra intimidad— ofreciéndonos sin cesar su amor para desmentir la falsa opinión que tenemos de Él.

El P. Jean Galot nació en Bélgica en 1919 e ingresó en la Compañía de Jesús en 1941. En la actualidad es consultor de la Congregación Romana del Clero y profesor emérito de Teología Dogmática en la Facultad de Teología y en el Instituto de Ciencias Religiosas de la Universidad Pontificia Gregoriana, de Roma. Colaborador habitual de la revista La Civiltà Cattolica, es también autor de numerosas obras, entre las que cabe destacar: Vivir con María, El corazón eucarístico, Dios y la mujer, El corazón de María, El corazón de Cristo, Descubrir al Padre y El Evangelio de la alegría.

Descripción: 180 p. 22x16 cm

Encuadernación: rústica

Colección: Biblioteca para la nueva evangelización